Hacia anexos certificados y una mejor salud mental en Yucatán

El reconocido médico psiquiatra Salvador González Gutiérrez, con amplia trayectoria a favor de la salud mental tanto en Yucatán como en el país, ha mostrado su respaldo a la propuesta del gobernador Joaquín Díaz Mena. Durante la sesión de la Mesa Estatal para la Construcción de Paz y Seguridad, el mandatario anunció el envío de una iniciativa al Congreso del Estado, cuyo objetivo es regularizar los centros de atención a personas con adicciones, conocidos como anexos, que actualmente operan sin apego a la Norma Oficial Mexicana.

González Gutiérrez destacó la importancia de que estos centros, que en 2022 contaban con 22 establecimientos de atención, se transformen en espacios regulados y con el apoyo especializado que exige la normativa. Según el psiquiatra, solo siete de estos anexos habían obtenido la certificación, y de ellos, únicamente dos contaban con presencia permanente de un médico psiquiatra. El especialista explicó que, si bien los psicólogos ofrecen un servicio valioso en el área de la salud mental, su formación no abarca la totalidad del contexto médico necesario para atender casos complejos de adicción.

La Norma Oficial Mexicana 028 establece que cada anexo debe contar con un médico especialista para garantizar la adecuada atención de los enfermos mentales y adictos. En este sentido, el doctor González enfatizó que una capacitación adecuada y el apoyo de un equipo médico especializado son fundamentales para fortalecer estos centros. Asimismo, destacó la urgencia de definir a qué nivel de gobierno corresponderá liderar esta estructura y de quién estará al frente de la salud mental y la atención a las adicciones de forma conjunta.

El psiquiatra también subrayó la necesidad de ampliar la base de conocimiento mediante investigaciones epidemiológicas que identifiquen las drogas de mayor incidencia y los grupos más vulnerables en Yucatán. Con esta información, se podrán diseñar políticas públicas integrales, crear nuevos centros de atención en zonas estratégicas y mejorar la atención de los centros ya certificados.

Aunque los anexos surgieron originalmente para suplir deficiencias en los servicios de salud, hoy se requiere un cambio de paradigma que reconozca a la persona adicta como un enfermo mental. Según Salvador González, la experiencia acumulada a lo largo de décadas ha demostrado que tratar la adicción como un problema puramente social no es suficiente, y que la intervención de psiquiatras, con su formación médica y especializada, es esencial para brindar un apoyo real y efectivo.

La iniciativa del gobernador para regularizar los anexos se enmarca en la búsqueda de una atención humanizada y especializada, donde tanto la salud mental como el tratamiento de las adicciones se aborden desde un enfoque integral. Este cambio no solo pretende mejorar la calidad de vida de los pacientes, sino también establecer un modelo de atención que pueda ser replicado en otros estados del país.