Yucatán amplía la protección de su anillo de cenotes para asegurar el agua del mañana

El Gobierno de Yucatán oficializó, mediante el decreto 88/2025 publicado en el Diario Oficial del Estado, la ampliación del perímetro de protección de su emblemático anillo de cenotes, elevándolo a 213,737 hectáreas. Con esta medida, que incorpora a los municipios de Abalá, Izamal y Tixkokob, se fortalece la salvaguarda del agua dulce que abastece a más del 70% de la población yucateca.

Frente a la creciente amenaza de contaminación y sobreexplotación del acuífero maya, la nueva delimitación geográfica se organiza en tres subzonas —recarga, tránsito y descarga—, permitiendo una gestión más precisa de los recursos hídricos. Este enfoque técnico también reconoce el valor cultural e histórico de los cenotes, esenciales para las comunidades locales y la identidad regional.

Más allá de garantizar el abasto de agua, la ampliación impulsa actividades de desarrollo sustentable, como el ecoturismo y la apicultura, que encuentran en los cenotes un escenario privilegiado para su crecimiento responsable. La zona protegida incluye 24 cenotes de alta relevancia ecológica, creando oportunidades para proyectos educativos y de investigación ambiental.

La Comisión Nacional del Agua advierte que el 40% de los mantos acuíferos subterráneos del país presenta algún grado de contaminación. Con esta acción estratégica, Yucatán refuerza la protección ambiental, contribuye a la economía circular local y se suma al 67.2% del agua renovable que concentran los estados del sur-sureste mexicano.