Incendios e invasiones desatan la deforestación en Campeche

La Secretaría de Medio Ambiente, Biodiversidad, Cambio Climático y Energía ha derivado a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) nueve reportes por hechos que presuntamente involucran incendios e invasiones, actos que facilitan el cambio ilegal de uso de suelo y provocan la deforestación. Según informó Luis Antonio Martínez Yañez, director de Desarrollo Forestal Sostenible de la Semabicce, la Ley Forestal Federal contempla dos tipos de sanciones para quienes realicen de forma irregular el cambio de uso de suelo o provoquen incendios. Esta legislación protege todas las áreas forestales denunciadas por estos hechos durante 20 años, evitando que sean taladas o quemadas para transformarlas en otro tipo de terreno.

En el municipio de Hopelchén se ha registrado una devastación significativa. Martínez Yañez explicó que, en este caso, comunidades menonitas han estado implicadas en desmontar y quemar la vegetación, provocando un cambio de uso de suelo que, en lugar de permitir una degradación natural, se traduce en la quema de los árboles. Este fenómeno obliga a las autoridades a actuar con rapidez, ya que la detección oportuna es clave para sancionar el ilícito. En muchos casos, “no se percataban hasta que ya la quemaron”, lo que complica la aplicación de la ley.

Para determinar si se trató de una quema ilegal, el personal realiza un barrido en el área para comprobar si la vegetación se encontraba en pie antes del incendio o si ya había sido derribada. Con base en este análisis se elabora el reporte que se remite a la Profepa. Hasta el momento, se han presentado denuncias que comprenden 30 polígonos, estimándose una afectación que supera las 700 hectáreas en lo que va de 2025. Las investigaciones han mostrado que las denuncias son similares tanto para terrenos de campechanos como para aquellos relacionados con comunidades menonitas, siendo la mayor extensión de deforestación en Hopelchén, donde se detectó la pérdida de más de 320 hectáreas.

En la Reserva de Balam Ku también se ha identificado un cambio de uso de suelo, pero en este caso, como resultado de invasiones por parte de pobladores de otras entidades. Durante un operativo conjunto entre la Profepa y las fuerzas armadas, se detectó en la Laguna del Teniente—ubicada dentro de la reserva—más de 40 hectáreas ocupadas por personas provenientes de Chiapas y de la Sierra de Veracruz, quienes invadieron terrenos en una zona de humedal. Rodolfo Piñeira, director de la Reserva de Balam Ku, señaló que la superficie invadida parecía encontrarse ya fraccionada tras la inspección en la entrada del asentamiento urbano ilegal, lo que refuerza la gravedad de este delito federal, cuya investigación y sanción corresponden a la Profepa.

La situación evidencia la necesidad de una vigilancia constante para preservar los ecosistemas y garantizar el cumplimiento de la Ley Forestal Federal. Los casos de deforestación, incendios e invasiones no solo alteran el paisaje natural, sino que también representan un desafío para las autoridades encargadas de proteger el medio ambiente, resaltando la importancia de actuar de manera oportuna para evitar daños irreparables en el entorno.